Finanzas y contabilidad

¿Cómo se clasifican las existencias en contabilidad?

 


En este artículo vamos a ver cómo se clasifican las existencias en contabilidad. Las existencias se recogen en el grupo 3 del Plan General de Contabilidad.

Las existencias son activos que posee la empresa para venderlos en el curso normal de la explotación, en proceso de producción o en forma de materiales o suministros para ser consumidos en el proceso de producción o en la prestación de servicios.

Podemos desglosar las existencias en cuatro bloques:

Elementos que son objeto de compra o venta, sin transformación

Todas aquellas existencias que se compran o venden sin sufrir ningún tipo de transformación, las vamos a contabilizar en las cuentas:

Si cuando vamos a cerrar el ejercicio económico, normalmente el día 31 de diciembre, existen mercaderías que se encuentran de camino al almacén y son propiedad de la empresa, estas las tenemos que incluir también en estas cuentas.

En cuanto a los envases y embalajes con los que se protegen dichas existencias, vamos a utilizar las cuentas:

Si dichos embalajes forman parte del producto, sin que en la venta se diferencie el importe del producto y el importe del embalaje, los podemos incluir en la cuenta elementos y conjuntos incorporables.

Ocurre lo mismo que con los embalajes, si los envases forma parte del producto y no se distingue en la venta el importe del producto y el importe del envase, se pueden incluir en la cuenta elementos y conjuntos incorporables.

En el caso de que los embalajes o los envases, por sus características se consideren inmovilizado, no deben figurar dentro de las existencias, sino en el inmovilizado, como activo no corriente, en la cuenta 219 otro inmovilizado material.

Elementos destinados a formar parte de los productos fabricados por la empresa

En cuanto a los elementos destinados a formar parte de los productos fabricados por la empresa, lo recogemos en las siguientes cuentas:

Como por ejemplo, en una empresa de fabricación de coches, serían las ruedas, baterías, aparatos medidores que figuran en el salpicadero del coche, etc.: todos estos elementos, normalmente, no se elaboran en al fábrica de coches, sino en empresas especializadas.

Elementos destinados a ser consumidos por la empresa, sin formar parte de los productos que se elaboran en ella

Durante el periodo de fabricación, existen elementos que se utilizan para la elaboración de los productos, pero que no forman parte de ellos como:

Los repuestos los vamos a contabilizar así:

Los elementos que se incluyen en estas cuentas deben cumplir dos requisitos:

  1. Que sean almacenables, si no lo son, se consideran gastos del grupo 6.
  2. Que no se consideren inmovilizado, lo cual suele ser cuando su ciclo de almacenamiento es superior a un año.

El PGC entiende por otras materias, aquellas que no se pueden considerar incluidas en las demás cuentas de materias consumibles y almacenables. Por ejemplo, las barras de soldadura o estaño, grapas para las chapas, etc.

Los fabricados por la empresa o derivados de la fabricación principal





Los productos que la empresa fabrica, se pueden clasificar en:

Dentro del subgrupo 33 Productos en curso, se deberá incluir la cuenta servicios en curso, ya que, aunque no figure en el cuadro de cuentas, los servicios en curso sí aparecen como existencias en la definición del mencionado subgrupo en la parte 5ª de los planes contables. A estos servicios en curso activados como existencias dedicamos el epígrafe 10.7 de este capítulo.

¿Cómo se clasifican las existencias?

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